Tito y los tarántulas. La relación entre cine y música como ya hemos visto en otras entradas o canciones es de lo más fructifera. No sólo actores y actrices saltan a la fama a causa de su participación en video clips. Un claro ejemplo de ello son Crazy de Aerosmith o algún otro que ya hemos visto.Pero hoy un seguidor del blog me ha pedido este tema de Tito&Tarántulas por una razón que luego él explicará.(vais a flipar)
Esta canción surje de la relación de amistad entre Robert Rodriguez, el director de cine y el líder del grupo Tito Larriva. La historia de esta canción surgió durante el rodaje de "El Mariachi"...Tito se encontraba componiendo una canción sobre la oscuridad y el vampirismo. Robert, que es gran amigo del vocalista comentó que estaba pensando en relaizar una película de vampiros, ni corto ni perezoso, Tito adaptó esta canción para la banda sonora de From Dusk till Down (aquí lo tradujeron como abierto hasta el amanecer, es una manía que se tiene en este país, la de traducir los títulos como les sale de los coj..).
De hecho Robert y Tito realizaron una gira despúes de este film en la que el director de cine formaba parte de la banda como tercer guitarrista.
Bueno...video musical....¿Para qué?, La escena de la película en la que se interpreta la canción regaló a Salma Hayek la fama internacional, no me extraña. Hasta las butacas del cine se preguntaban...pero,pero, pero..¿quién es esa pedazo de hembra??.
Ahora...os adjunto el maíl-relato de XXX, es largo, quizá el más extenso de los que he compartido...pero si no te hace galopar la sangre por la venas es que estás muerto o eres un Vampiro/a...Me he saltado los agradecimientos y presentaciones ya que eso es privado...os adjunto el relato puro y duro. El autor me jura y perjura que es real como que estamos respirando y me pide que lo comparta...Así que disfrutadlo amigas/os. 720hd.
La vida es curiosa, nunca justificaría comportamientos que tengo ahora, como tampoco justifico ahora algunas cosas que hacía antes. Hecho la vista atrás y no me reconozco. Supongo que será la edad, el tiempo, la experiencia ¿o qué se yo?.
No sé si os pasa también a vosotros, al mirar atrás un día, no os reconocéis, siendo la misma persona.
Soy un hombre bien posicionado. Fruto del esfuerzo, la fortuna y el trabajo, conseguí lo que tengo, eso me hace ser acreedor de un gran orgullo. Mi juventud fue muy cómoda, hijo de un familia de clase media no tuve que trabajar para costearme los estudios (que no es poco actualmente). Fue al ingresar en la Universidad hace ahora casi 12 años cuando conocí a Natalia, mi mujer. Una belleza andaluza de ojos negros azabache, larga melena y esbelta figura.Tiene un parecido atroz a Salma Hayek, todo el mundo se lo dice. El paso del tiempo ha sido benévolo con ambos, aunque he de reconocer que con ella ha sido insultantemente permisivo.
Siempre he sido muy celoso, Natalia levanta pasiones allá por dónde va desde que es una niña. Hemos tenido infinidad de discusiones por mi exceso de celos, en alguna ocasión en mi juventud llegué a las manos con algún patoso.
Hace meses me sorprendí un día reflexionando sobre mi mujer. Todo el mundo comenta lo guapa que es, lo bien que se conserva, que parece tener 19 años teniendo 30 etc… y fue entonces cuando me di cuenta que esa sensación de que todo el mundo la adorase, hacía volar mi ego por las nubes, tanto es así que descubrí que mi propio ego me excitaba.
Es cierto, siempre me ha gustado que mi mujer se arregle y se sienta deseada. Incluso alguna vez cuando venía a buscarme al consejo de administración, notaba como las cabezas de mis socios y socias también , se volteaban para mirarla a través de la cristalera.
Siempre se montaba un pequeño revuelo cuando aparecía cargada de bolsas, con su larga melena ondeando como una estrella de cine y sus elegantes faldas de tubo, dibujando su figura a la perfección.
Pero aquella sensación era nueva, deseaba presumir aún más de ella. Quería que pudiesen disfrutar de la belleza que guardaba, me parecía injusto esconder a la humanidad el milagro que es una mujer bella.
Me parecía sumamente egoísta censurar o disfrutar esa belleza yo sólo.¿Y por qué no confesarlo? quería hacerles sentir aún más envidia.
Esa misma noche tracé un plan, compré en Internet una cámara de fotos de último modelo, casi profesional, y me la envié a casa. Durante la cena inventé una milonga sobre recuperar aficiones del pasado, ella sabía de sobra lo mucho que me apasiona la fotografía y mi moderado talento para tal arte. Así que amparado en el cuento de que quería ser como Anne Leibovitz…picó mi anzuelo.
Después de la cena sabía que el vino habría hecho su efecto y que no podría darme una negativa a la invitación que le ofrecía….que hiciese de modelo. Las mujeres son coquetas por naturaleza, y esa coquetería bien llevada, suele desencadenar en un dulce y elegante exhibicionismo. Natalia entre risas no tardó en acercarse al equipo de música y seleccionar su canción After Dark de la banda sonora de abierto hasta el amanecer. Comenzó a quitarse la ropa despacio, bailando para mí y para la cámara.
La blusa calló al suelo dejando su redondo torso al aire, no llevaba sujetador, sus pezones erectos delataban que el juego la encantaba, el flash de la cámara disparaba sin cesar. Subía los brazos hacía el cielo para enseñar al objetivo su pecho en su máxima expresión. Buscaba su perfil para que la dureza de sus pezones quedase inmortalizada. Se acercó a mí a la distancia justa, se dio la vuelta, invitándome a bajar la cremallera de su falda. Con dos simples golpes de cadera al ritmo de la música, la elegante falda de tubo calló al suelo, para hacer compañía a la blusa.
Se descubría ante mí un trasero redondo y suave, apoyado en unos tacones de aguja…¡qué razón tenían nuestras amistades sobre como se conserva!.
Fingiendo recoger la falda del suelo y todavía de espaldas abrió sus piernas y se agachó, el tanga negro estaba descolocado por lo que uno de sus labios vaginales era perfectamente visible, momento que por supuesto también inmortalicé. Al percatarse Natalia posicionó su mano en su trasero, separó un cachete para que no se quedase sin fotografiar nada de su anatomía.
Esa fue una toma mágica, su sonrisa eterna, su mirada pícara, accesible invitando al espectador a contemplar todo de ella, hasta su interior.
Hice un total de 436 fotos del streptease. Desde la primera, completamente vestida, hasta la última en la que se sentaba en una silla con sus piernas completamente abiertas, vestida únicamente con sus zapatos de tacón y permitiendo a la cámara captar el beso que sus labios vaginales le proporcionaban a la silla. Mirando a la cámara con la máxima sensualidad que su rostro le permitía (y no es poco creedme) abriéndose y mostrándose por completo ante mí y mi objetivo.
Después de hacer el amor esa noche mientras Natalia dormía, me levanté y corrí hasta el ordenador. Grabé un c.d con las fotografías y lo guardé en mi maletín.
Al llegar al despacho la mañana siguiente visioné el contenido, un rayo atravesó mi mente, un escalofrío de morbo incontenible. Poseído por mis deseos registré una cuenta de mail anónima. Seleccioné alrededor de 15 fotos de mi mujer posando la noche anterior, fotografías en las que su rostro era perfectamente identificable y en las cuales se mostraba por completo, las adjunte en un mail. Copié las primeras diez direcciones de mis socios del consejo y las puse en el buzón de salida. Antes de darle al botón de “enviar” reflexioné y decidí poner en el asunto “La mujer del Jefe”. Eso sería suficiente para en el caso de ser descubierto eliminar cualquier sospecha.
Pasaron los días y mi imaginación volaba, esperando el momento en el que uno de mis socios entrase por la puerta y dijese -tenemos que hablar-.
Los empleados empezaron a reunirse en los ordenadores. Risas escandalosas por parte de los menos discretos y miradas furtivas cargadas de miedo o admiración hacia mi despacho, presidían las mañanas. La idea de que mi mujer estuviese accesible a cualquiera me encantaba. Pero los días pasaban y nada sucedía, incluso acudió en alguna ocasión a buscarme y pude ver como la curiosidad se tornaba en admiración. Era evidente que sus fotos rondaban por la oficina pero nadie me decía nada.
Al entrar Natalia en el despacho tras dejar sus bolsas en el suelo le dije.
-Nati, mi amor mira que foto he puesto de salvapantallas- Se trataba la foto de la silla en un elegante B/N..No sabía cual sería su respuesta, esperaba un…
-Estás loco!!Quita eso!!-
Pero cual fue mi sorpresa, cuando dijo.
-Es bonita, esa me encanta-
Sabedora de que cualquiera que entrase podría verla, se enorgullecía como la Diosa que es.
Quitándole importancia a la fotografía tras mirarla unos segundos me dijo.
-Amor mío he reservado mesa en el restaurante las 22.00-.
Poco a poco el tiempo fue pasando. Incluso hacía llamar a mi despacho a mis empleados sin motivo concreto. Cualquier excusa era buena para que viesen la desnudez de mi mujer. Algunos me decían al ver la pantalla del ordenador…
-¿Es la señora Fuentes verdad?- a lo que yo respondía
-Si lo es, está guapa verdad- y posteriormente les hacia levantarse, o giraba la pantalla acercándola para que la viesen bien. Todos trataban de disimular, justificando la larga atención prestada a la imagen por forma y sobre todo por contenido.
-Es una gran fotografía, tiene Vd un gran ojo-.
Esa misma tarde recibí un paquete en la oficina, algo extrañado, ya que era un poco más grande de lo normal, Tras palparlo en un primer momento me di cuenta de que se trataba de un cuaderno o algo parecido. Cansado de elucubrar lo abrí sin más pérdida de tiempo. Parecía un calendario, pegado en la portada un folio manuscrito era la letra de Natalia decía así:
“Estaba en casa y una mañana al mirar el Mail descubrí que ibas a ser víctima de un chantaje, Habían robado nuestras fotos. Antes de que todo se fuese de las manos decidí tomar cartas en el asunto. Sé que me quieres y presumes de mí, pero es algo que no todo el mundo entiende… Antes de que nadie se diera cuenta copié el Mail y lo reenvié a mi nombre, Convoqué la idea de realizar un calendario sexy , incluso muy subido de tono a las mujeres de la empresa .Yo sería la que rompería el hielo, y los beneficios del mismo, los donaríamos a alguna organización para el cuidado de los niños con cáncer, era la única salida.
Nunca imaginé que la respuesta fuera así. Todas las chicas de la empresa querían participar, de hecho algunas se quedaron fuera. Aquí tienes el resultado del boceto para el calendario del año que viene. Encontrarás a Esther tu secre a María la directora de Recursos humanos y algunas de las mujeres de tus socios…jiji
P.d “Yo soy mayo, que nos disfrutéis…. te quiero”
-Natalia-
Qúe sexy!Me encantó..no sé si será verdad pero guau...
ResponderEliminarQuiero ese calendario!!!!!
ResponderEliminarWuauu...I'm hot sweetheart...what a nice history!!!
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